Conferencia de Jordi Casas sobre el nacionalismo catalán y sus relaciones con Madrid

Pamplona, 24 de abril de 2018

¿Relaciones entre Cataluña y Madrid? Inexistentes. Con esa contundente afirmación empezaba el Excelentísimo Señor Jordi Casas i Bedós la ponencia el pasado martes. La situación en Catalunya es fruto de un pueblo sentimentalista y fácilmente moldeable, un pueblo cuya inmadurez política ha producido que se llegue a ese extremo, afirmaba. La antigua coalición CiU se ha autodestruido, es algo ciertamente surrealista. Mientras que la Unión Europea se fundamente en el estado del bienestar y el respeto al principio de legalidad “rule of Law”, Catalunya persigue una fantasía fruto de la mala gestión política y contraria a los propios principios de la entidad supranacional de la cual pretende reconocimiento.

Con una posición clara desde el inicio, Jordi Casas continuaba: En el año 2007 Francesc Homs ya publicó un articulo que establecía las bases del Derecho a Decidir. Se toma desde las directrices de CiU un cambio de rumbo con la entrada de Artur Mas, esa nueva dirección es el sustrato ideológico rupturista. La ideologización en el pueblo catalán ha llegado a un punto el cual ya no es posible el diálogo, es una exclusión total de los catalanes que se sienten españoles.

Tras una detallada exposición de todos los hechos que han producido el cambio político desde el tripartito, pasando por la política de desgaste de la “Izquierda de Junqueras” y terminando con el pasado referéndum, el ex delegado de la Generalitat recuerda qué es el verdadero catalanismo político: el catalanismo político, ahora casi extinguido por el nacionalismo, es el pensamiento de “si España funciona bien, mejor para todos”. El catalanista es el que quiere su pueblo y su lengua, pero lo quiere dentro de España, el que quiere que el país vaya mejor y por lo tanto la comunidad también. España es un conjunto de pueblos, esa diversidad no hay que entenderla como algo negativo sino como algo positivo, es algo enriquecedor.

Cuando se le pregunta en el punto final de la conferencia ¿Jordi, crees que se podrá retomar el diálogo? Su respuesta es afirmativa, habrá diálogo, pero no habrá intermediación de la unión europea. Esto es un asunto que debe solucionar España, está en juego el principio de legalidad. Se debe volver a los tiempos donde los políticos y la gente creía en la lealtad institucional y la claridad política.     

Oscar Pau Vinaixa

Delegado Arete-Pamplona